Hunde tus dedos en mi espalda
que el dolor me hace más fuerte
cuando estás sobre mi a horcajadas
humillando mi cuerpo dulcemente.
Con tus dientes, muérdeme el cuello
con tus piernas, rodearme el vientre
con tus pechos elevame al cielo
con tus labios, redimeme al instante.
Que la sangre me brote de la piel
cuando claves tus garras deliciosas
que así pueda ya gritar en mi placer
por sentirte en mis sueños tan hermosa.
Nos partiremos el alma de deseos
y de deseos sucumbiremos al amor
cuando ya en ti, me sienta preso
y quisiera en tu jaula, por fin morir.
Clavamela crayolita
