El día siete coincidiendo con mi cumpleaños, celebramos el nuestro, esos once años en el que coincidimos en esta vida y desde entonces sin necesidad de papeles nos unimos por el corazón.
No es casualidad que haya creado esta tarta virtual para celebrarlo con dos niños que nos representan, porque aunque nos estamos haciendo mayores juntos, a tu lado he ido sintiendo que mi corazón está cada vez más joven. Tu empezaste mi camino para volver a esa niñez que todos necesitamos.
Cuando te conocí, sabes que yo era un verdadero viejo, viejo de espíritu, de alma, de esperanza y poco a poco hiciste que cada año sin dejar de cumplir, me sentía más y más joven. A veces me he preguntado porque, aunque la respuesta aparecía al momento...la felicidad que iba sustituyendo a mi desesperanza tenia el secreto del rejuvenecimiento progresivo, esas risas diarias que en nuestros encuentros, era el eje central de nuestras conversaciones y que al cabo de los once años, sigue siendo el motor que alimenta nuestra hermosa relación.
He escrito varias reflexiones desde que te conocí, sobre este milagro que es el conocer a una persona que está a miles de kilómetros de distancia y aunque realmente es difícil, el trasfondo de que estas relaciones funcionen están en la honradez y la confianza mutua, una confianza que se adquiere con el tiempo cuando todas las barreras y obstáculos se van derribando una a una y sobre todo cuando por encima de los egoísmos, entendimos que la base principal está en amar por encima de todo...
Yo superé todas las barreras, el día que me dí cuenta lo importante que eras para mi, el valor que tenias como mujer y como persona y decidí hacerme el regalo de amarte para siempre. Quizás eso de para siempre suene muy arriesgado, pero cuando lo digo lo hago con cierto egoísmo del que tan orgulloso estoy, pues ese egoísmo me hace limar cualquier discrepancia que exista entre nosotros para hacerte feliz y sentirme siempre feliz porque para amar a una persona, se empieza por amarse a uno mismo, algo que me faltaba entender antes de conocerte...
Te he dicho en algunas ocasiones lo importante que fue para mi, saber que tenia la capacidad de amar, esa que perdí por mis errores y mi difícil vida que me alejó de los sentimientos y que tu hiciste que recuperara para de nuevo sentir que mi vida era hermosa y que había merecido la pena pasar por todo para poder valorar más lo que empezó contigo y que cambio mi vida...
Aunque mi cumpleaños es el día siete, decidimos celebrarlo hoy junto con nuestro once aniversario por ese viaje que comienzas este sábado hacia Canadá y no puedo dejar que te vayas sin que te lleve estos sentimientos que tu con tu amor y tu forma de ser has plantado en mi corazón.
Gracias crayolita por toda ese entrega tuya en estos años y por ser el motor que me hace seguir con alegría en este mundo tan dramático en el que vivimos y que tu me lo conviertes en un paraíso.
Feliz aniversario amor mío, te amooooo